Castillo de Portilla / Zabalateko Monumento multzoa. PORTILLA DE IBDA www.txurrumendi.org
La singularidad histórica más reseñable del Castillo de Portilla radica en servir de elemento icónico para el escudo de Araba/Álava. Un documento del siglo XVII de un vecino de Portilla menciona el sello de la localidad, señala que se usaba desde el siglo XIII y que se describe de modo muy similar al de Álava: Un risco, en su cima una torre acastillada, y en la altura de ella, un brazo con espada en su mano desenvainada. Y al pie de la torre un león, que estribando sobre sus pies, echa las manos a ella.
En un promontorio casi inaccesible, encima de la localidad de Portilla, aún se alzan los restos de dos torreones con una torre de planta cuadrada, a modo de torre del homenaje, de lo que fue el antiguo asentamiento de Portilla de Ibda. Además, de estos vestigios que conforman el antiguo castillo, se conserva el poblado fortificado que se extiende a sus pies con la antigua parroquia de Nuestra Señora del Castillo en su interior. Esta parroquia se ha mantenido en uso, como ermita con la misma advocación, hasta 1762.
Se trata de una ocupación que abarca desde la Protohistoria hasta la Edad Moderna. Se demostró su asentamiento durante el Bronce Final y Hierro I, durante el período tardorromano y durante la Edad Media (siglos XI y XV). Para finales del siglo XVIII estaba abandonado y pertenecía a los Velasco, Duques de Frías.
El castillo de Portilla fue construido muy posiblemente en la primera mitad del siglo XI, bien por el monarca pamplonés Sancho Garcés III el Mayor (1004-1035), bien por su hijo García Sánchez III (1035-1054); como medio para fijar su autoridad sobre suelo alavés. A lo largo de los siglos XI y XII, constituía un enclave defensivo en los avances del reino de Navarra hacia Álava y Castilla, ya que dominaba los caminos desde el Ebro, en torno a Miranda, hacia las cuencas de los ríos Ayuda e Inglares y por el poniente la zona formada por los valles de los ríos Inglares y Ega.
En el siglo XIII pasó a formar parte del reino castellano, desplazándose su frontera hacia el este. Esto provocó un despoblamiento en el poblado fortificado. Un reducido número de sus habitantes se asentarán al abrigo de la torre de los Ábalos en el Arrabal junto a la actual Portilla. Sin embargo la inmensa mayoría, a partir de la concesión del fuero a Berantevilla por Fernando IV de Castilla en 1312, se trasladará a esta nueva villa buscando mejores tierras de cultivo por su situación en el valle del Ayuda. Un nuevo núcleo de poblamiento surgirá entorno a la tierra de Soportilla, relegando paulatinamente al antiguo asentamiento de Portilla de Ibda. En el siglo XIV tanto la fortificación como el poblado estarían ya prácticamente despoblados siendo ocupados posteriormente sólo en épocas de conflictos bélicos.
El 15 de noviembre de 2011, el Viceconsejero de Cultura, Juventud y Deportes del Gobierno Vasco ha resuelto incoar y someter a información pública y audiencia a los interesados el expediente para la declaración de Bien Cultural Calificado, con la categoría de Conjunto Monumental, a favor de la Zona Arqueológica del Conjunto de Portilla. A pesar de esta resolución el castillo de Portilla se encuentra en un estado deplorable y de ruina progresiva.
Recientemente se ha elaborado un “Plan director de conservación del poblado de Portilla para coordinar una serie de actividades diversas y diferidas en el tiempo, que atiendan a la multidimensionalidad del monumento y sean sensibles a los nuevos datos que éste nos proporcione, desde su conocimiento y para su protección. Tanto desde el Ayuntamiento de Zambrana como desde la Junta Administrativa de Portilla se esta realizando un gran esfuerzo para potenciar la puesta en valor del conjunto monumental con la institucionalización del día los castillos. Para ello se ha elegido el tercer sábado del mes de junio programándose un recorrido desde la casa-torre de Berganzo, pasando por el castillo de Ocio y concluyendo en el castillo de Portilla, con una romería popular y visitas teatralizadas en cada una de las fortificaciones.
castillodeportilla.com/
alavaturismo.eus/
ananaturismo.com/
ayuntamientodezambrana.com/
castillo de portilla.wmv
Un llamamiento a la puesta en valor del patrimonio que poseemos en Alava y en contra del olvido en el que las instituciones entierran maravillas que otros paises pagarían por poseer
Poblado medieval Portilla de Ibda y su castillo (Alava)
Más info:
EL CASTILLO: SOBRE LA RÍA DEL NALÓN (SOTO DEL BARCO/SOTU'L BARCU, ASTURIAS)
El Castillo extiende sus casas a lo largo del camino que comunica con el antiguo Castillo de San Martín, del que se conserva parcialmente una única torre, sita esta en medio de una soberbia finca cerrada con una gran cerca almenada sobre un cueto que domina valle y estuario. El baluarte fue erigido, como otros de la costa, por el rey Alfonso III El Magno para defensa de la ría ante los ataques continuos de los normandos. Para ello se valió de una fortificación romana levantada a su vez sobre un castro astur. Siglos después el Castillo de San Martín fue tomado por Gonzalo Peláez El Conde Rebelde en sus guerras contra Alfonso VII El Emperador, volviendo a perderlo ante las huestes de Suero Vistrario, al servicio del monarca, iniciándose así unos siglos en el que fue escenario de numerosos asedios en las guerras nobiliarias y de linajes que se disputaban el trono.Luego Reyes Católicos intentarán hacerse con el control para la corona de todas las fortalezas de sus reinos, delegando esta operación en sus representantes o corregidores, como es el caso aquí de Luis Mejía primero y después de Alonso de Valderrábano. Así en 1490 no volverá a haber luchas entre la nobleza por su pertenencia, los reyes serán sus dueños y de esta manera Felipe II otorgará a perpetuidad a finales del siglo XVI el título de Castellano de San Martín a Sancho de Miranda. El alcázar iría perdiendo su valor defensivo: al extenderse el uso de la pólvora la protección de la ría del Nalón o de San Esteban pasaría a cargo de unas baterías de cañones emplazadas en el promontorio del Espíritu Santo, sobre su misma desembocadura, a varios kilómetros de aquí y en términos del concejo de Muros. No obstante aún en el siglo XVIII las crónicas nos informan que era esta aún una construcción soberbia, con capilla dedicada a San Martín y siendo verdaderamente dos castillos con plaza de armas y torre del homenaje, la que llegó a nuestros tiempos, así como un túnel que comunicaba el puerto con la barquería, donde estaban las barcas que comunicaban las dos orillas. Ahora el lugar es como dijimos una extensa finca con jardines y arbolado, mas una casa con galería al pie de la torre y otras dependencias, propiedad de la familia Fierro, pues en 1918 el empresario y benefactor del concejo, Ildefonso Fierro, compró y restauró lo que quedaba del enclave.
Subiendo al pueblo de El Castillo, un ramal bajo las galerías y corredores de las casas va hacia la entrada de la finca del castillo y baja a la histórica barquería. Otro, la senda señalizada, sigue de frente y se dirige a un coqueto mirador sobre pueblo, fortificación y ría. Allí abajo en la orilla bajo la torre tenemos La Barquería del Castillo, hoy en día modesto muelle con embarcaderos de lanchas hechos de madera de forma artesanal. Antaño las barcas de pasajes salían de aquí rumbo al embarcadero de El Forno, al otro lado de la ría, tal y como haria, aún en 1843 el capitán inglés Samuel Cook Widdrington. Actualmente al perderse este servicio con la inauguración en 1883 del Puente la Portilla, que también vemos algo más al sur, estamos obligados a realizar un rodeo para llegar a él. Esta ribera de El Castillo tiene no pocas reminiscencias mitológicas, pues aquí, en el Cañu del Charcu, se dice vivía un cuélebre (serpiente alada de la mitología asturiana), con unas alas grandísimas, al que un día se llevó la marea.
El paso de las rías era antaño un desafío formidable para viajeros y peregrinos, porque según las crónicas, barcas y barqueros, cuando los había, solían cobrar muchas veces precios elevados por pasar personas y caballerías. Al mismo tiempo las embarcaciones no eran en su mayor parte un portento de seguridad, era fácil caer al agua e incluso zozobrar y naufragar por la fuerza de las corrientes. Por ello muchas personas, temerosas de sus dineros y vida, solían desviarse hacia el interior. Esta es la razón en Asturias de los enlaces (no señalizados actualmente como rutas xacobeas salvo el que va de Oviedo/Uviéu a Avilés) entre Camino de la Costa y Camino del Interior o Primitivo, pues también ocurría en ocasiones lo contrario: en épocas de nieves, fríos o tormentas, muchos preferían bajar al más benigno clima costero para seguir ruta, pese al inconveniente del paso de las rías. El inconveniente cesaría aquí en 1883 al construirse El Puente la Portilla, paso del Nalón por la nueva carretera, el cual admiramos sobre las aguas, junto a más pequeños embarcaderos de tablas, en la lejanía, bajo las alturas de las montañas que dominan el litoral, en cuyas faldas se asientan las aldeas. Junto al puente hay también un islote herboso, El Yaín.
Artas Plastas Virginia Portilla 4º Bloque.
Aquí el ORIGEN de tu APELLIDO
intro: by Laurent Caccia
youtube.com/laurentcaccia
in the description of the video will suffice.
Todas las personas tienen al menos un nombre y apellido, y como sería casi imposible identificarlo, nos resultaría muy raro alguien sin ellos. Lo cierto es que no siempre existieron los apellidos.
Subida Toranzo portilla 01
Primera pasada
Moruzzi-Portilla TP historia
Spot Cuna Jardín Castillo de Angelitos
Tumbes
LA RÍA DEL NALÓN (ASTURIAS). PASO DEL CAMINO DE LA COSTA
Vista de La Ría del Nalón desde Soto del Barco/Sotu'l Barcu (Asturias), Estamos en los jardines del Palacio de la Magdalena, donde se contempla este paisaje: El Puente la Portilla, construido en 1883 y vuelto a construir tras su voladura en la guerra civil, por donde pasa el Camino de Santiago de la Costa hacia el vecino concejo de Muros de Nalón, cuya capital vemos en lo alto. Junto al puente hay un islote herboso: El Yaín. En el paisaje manchas forestales de monocultivo de eucalipto ocupan buena parte de los antiguos pastizales y las junqueras son actualmente espacio protegido por su interés ecológico, vegetación propia de estas orillas e importante fauna natural. Allí estuvo El Forno, embarcadero de lanchas existente desde tiempo inmemorial y que desapareció al hacerse el puente. Al fondo vemos la población de San Esteban, antaño puerto comercial y carbonero. A la derecha tenemos El Castillo, pueblo y torre que es lo que queda del antiguo Castillo de San Martín de Soto, levantado por los reyes asturiano sobre y castro astur y fortaleza romana anteriores con la idea de proteger el estuario de las incursiones vikingas. Luego fue plaza fuerte en guerras nobiliarias. A sus pies se conserva La Barquería del Castillo, por donde salían las lanchas hacia la orilla de Muros, ahora muelle de palos y tablas para barcas de pescadores. Al fondo está el pueblo de pescadores de L'Arena, con La Barra de San Esteban, gran dique en la desembocadura de la ría.
Mirador del castillo de la bolera de los moros
Por Álava y sus Leyendas. Monte la Isla.Peñacerrada.
En 1385 entre Peñacerrada y Montoria tuvo lugar un asesinato en el cual, el hijo del señor de Montoria fue ahorcado en un árbol dentro del monte llamado LA ISLA.
La historia nos cuenta que todos aquellos vecinos de estos dos pueblos que ayudaron a este señor a buscar a su hijo y a vengar este asesinato fueron recompensados con la donación de este monte.
Hoy en día existe una asociación compuesta por los descendientes de aquellos valientes vecinos, que siguen administrado dicho monte.
EL CASTILLO DE SAN MARTÍN DE SOTO EN LA RÍA DEL NALÓN (ASTURIAS)
El Castillo extiende sus casas a lo largo del camino que comunica con el antiguo Castillo de San Martín, del que se conserva parcialmente una única torre, sita esta en medio de una soberbia finca cerrada con una gran cerca almenada sobre un cueto que domina valle y estuario. El baluarte fue erigido, como otros de la costa, por el rey Alfonso III El Magno para defensa de la ría ante los ataques continuos de los normandos. Para ello se valió de una fortificación romana levantada a su vez sobre un castro astur. Siglos después el Castillo de San Martín fue tomado por Gonzalo Peláez El Conde Rebelde en sus guerras contra Alfonso VII El Emperador, volviendo a perderlo ante las huestes de Suero Vistrario, al servicio del monarca, iniciándose así unos siglos en el que fue escenario de numerosos asedios en las guerras nobiliarias y de linajes que se disputaban el trono.Luego Reyes Católicos intentarán hacerse con el control para la corona de todas las fortalezas de sus reinos, delegando esta operación en sus representantes o corregidores, como es el caso aquí de Luis Mejía primero y después de Alonso de Valderrábano. Así en 1490 no volverá a haber luchas entre la nobleza por su pertenencia, los reyes serán sus dueños y de esta manera Felipe II otorgará a perpetuidad a finales del siglo XVI el título de Castellano de San Martín a Sancho de Miranda. El alcázar iría perdiendo su valor defensivo: al extenderse el uso de la pólvora la protección de la ría del Nalón o de San Esteban pasaría a cargo de unas baterías de cañones emplazadas en el promontorio del Espíritu Santo, sobre su misma desembocadura, a varios kilómetros de aquí y en términos del concejo de Muros. No obstante aún en el siglo XVIII las crónicas nos informan que era esta aún una construcción soberbia, con capilla dedicada a San Martín y siendo verdaderamente dos castillos con plaza de armas y torre del homenaje, la que llegó a nuestros tiempos, así como un túnel que comunicaba el puerto con la barquería, donde estaban las barcas que comunicaban las dos orillas. Ahora el lugar es como dijimos una extensa finca con jardines y arbolado, mas una casa con galería al pie de la torre y otras dependencias, propiedad de la familia Fierro, pues en 1918 el empresario y benefactor del concejo, Ildefonso Fierro, compró y restauró lo que quedaba del enclave.
Subiendo al pueblo de El Castillo, un ramal bajo las galerías y corredores de las casas va hacia la entrada de la finca del castillo y baja a la histórica barquería. Otro, la senda señalizada, sigue de frente y se dirige a un coqueto mirador sobre pueblo, fortificación y ría. Allí abajo en la orilla bajo la torre tenemos La Barquería del Castillo, hoy en día modesto muelle con embarcaderos de lanchas hechos de madera de forma artesanal. Antaño las barcas de pasajes salían de aquí rumbo al embarcadero de El Forno, al otro lado de la ría, tal y como haria, aún en 1843 el capitán inglés Samuel Cook Widdrington. Actualmente al perderse este servicio con la inauguración en 1883 del Puente la Portilla, que también vemos algo más al sur, estamos obligados a realizar un rodeo para llegar a él. Esta ribera de El Castillo tiene no pocas reminiscencias mitológicas, pues aquí, en el Cañu del Charcu, se dice vivía un cuélebre (serpiente alada de la mitología asturiana), con unas alas grandísimas, al que un día se llevó la marea.
El paso de las rías era antaño un desafío formidable para viajeros y peregrinos, porque según las crónicas, barcas y barqueros, cuando los había, solían cobrar muchas veces precios elevados por pasar personas y caballerías. Al mismo tiempo las embarcaciones no eran en su mayor parte un portento de seguridad, era fácil caer al agua e incluso zozobrar y naufragar por la fuerza de las corrientes. Por ello muchas personas, temerosas de sus dineros y vida, solían desviarse hacia el interior. Esta es la razón en Asturias de los enlaces (no señalizados actualmente como rutas xacobeas salvo el que va de Oviedo/Uviéu a Avilés) entre Camino de la Costa y Camino del Interior o Primitivo, pues también ocurría en ocasiones lo contrario: en épocas de nieves, fríos o tormentas, muchos preferían bajar al más benigno clima costero para seguir ruta, pese al inconveniente del paso de las rías. El inconveniente cesaría aquí en 1883 al construirse El Puente la Portilla, paso del Nalón por la nueva carretera, el cual admiramos sobre las aguas, junto a más pequeños embarcaderos de tablas, en la lejanía, bajo las alturas de las montañas que dominan el litoral, en cuyas faldas se asientan las aldeas. Junto al puente hay también un islote herboso, El Yaín.
Trams en moto, N-621, Puerto de San Glorio - Portilla de la Reina 001
Zambrana 1
Centro del pueblo
Historia verdadera de la conquista de la Nueva España | Bernal Díaz del Castillo | Spanish | 1/23
Historia verdadera de la conquista de la Nueva España | Bernal Díaz del Castillo | Early Modern | Audiobook full unabridged | Spanish | 1/23
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Bernal Díaz del Castillo, conquistador español, participó en la conquista de México. En su Historia verdadera de la conquista de la Nueva España apura las verdades, sin omitir los problemas, para dejar claro cual fue su actitud y la de los otros conquistadores. La historia se presenta en un modo brillante que ha apasionado siempre a los lectores. - Summary by Tux
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castillo y palacio de guevara video
castillo y palacio de guevara alava destruido en el año 1839 video
Ruta Portilla Bejarana
Ruta de senderismo en la sierra de Francia ( Salamanca) en el paraje de la Portilla Bejarana, muy cerca de La Alberca, recorriendo las crestas de las Halconeras, partiendo del collado del Portillo para hacer una ruta circular con impresionantes vistas de la sierra de Bejar al fondo. Panoramicas también de las montañas de las Hurdes y de las Batuecas
video Paola Portilla Origen