Descubriendo el Goierri
Zerain, situado bajo la sierra de Aizkorri, ofrece una gran belleza paisajística e interesantes itinerarios en un entorno rural: en su casco se pueden admirar la iglesia parroquial, el Palacio Jauregi, el Museo Etnográfico y la cárcel del s.XVIII; junto a la oficina de información turística, se sitúa una tienda con productos del país como sidra, quesos artesanos, alubias, manzanas del país, mermeladas, cerámica, etc. En una sala del museo, se pueden realizar catas y maridajes entre queso Idiazabal y sidra, producido todo en los caseríos de la zona; en los alrededores podemos visitar la serrería hidráulica de Larraondo.
A 5 minutos de pueblo rural de Zerain, tenemos el Complejo minero de Aizpea, con un centro de interpretación de la minería. En dicho complejo, se ha extraído mineral desde el siglo XI hasta mediados del siglo XX. Muestra de ello, se pueden visitar las recuperadas instalaciones del complejo, situadas en un entorno rural sin parangón.
Gabiria es un pequeño pueblo rural situado en una de las partes más altas del Goierri: como dice el refrán “Gabiri: toki guztietatik ageri” (visible desde todos los sitios).
Desde Gabiria podremos observar parajes y lugares con un encanto remarcable como las Sierra de Aizkorri y la Sierra de Aralar, algunos pueblecitos de los alrededores, panorámicas espectaculares, la iglesia parroquial de Santa María, el Ayuntamiento y el Ostatu están entre las edificaciones más notables del pueblo.
Desde la Edad Media la actividad económica de Mutiloa ha estado marcada por la minería. Se trata de un pequeño municipio rural con multitud de caseríos diseminados.
El núcleo del pueblo se conforma como el típico casco de un pequeño pueblo de tradición rural, destacando la Iglesia Parroquial de San Miguel; uno de los más bellos parajes de la villa está constituido por el barrio de Liernia, donde se encuentra la Ermita de Liernia, a cuya Virgen es tradición ofrecer velas para que cuide de la salud de los niños y la fertilidad de las madres. Este barrio nos lleva a un entorno rural desde el que tenemos unas excelentes vistas de la Sierra de Aizkorri.
La fundación del pueblo de Segura fue decidida por mandato del rey de Castilla Alfonso X El Sabio en 1.256, con el propósito de proteger los caminos que se dirigían desde la meseta al otro lado de los Pirineos. Segura, es una de las villas medievales que merece la pena visitar en el Goierri tanto por su casco almendrado como por su fácil y rápido acceso desde la capital, Donostia-San Sebastián (37 minutos). Se encuentra a 5 minutos de la A1, en un entorno rural privilegiado.
Segura, durante muchos años fue un punto de paso obligado entre Castilla y Francia, y todavía hoy se conservan algunas casas solariegas y palacios de la época como Palacio Ardixarra (sede del Centro de Interpretación Medieval), Palacio Lardizábal (Ayuntamiento), así como la iglesia Parroquial de la Asunción. El municipio conserva su casco almendrado intacto.
Segura es conocida sobre todo por las procesiones de Semana Santa: son diez los pasos que salen el Jueves y Viernes Santo y el más conocido es el paso de Jesucristo Crucificado, del escultor sevillano Juan Martínez Montañés; otros actos reseñables son el día de San Nicolás, el campeonato de Euskal Herria de baile al suelto y la feria medieval que se organiza cada 2 años y traslada a la localidad a la Edad Media.
Goierriturismo